“¡ S E D O B L A , S E D O B L A , PERO N O S E ROMPE!”

Todo se vino dando en cascada, en un proceso digamos que rápido, pero que también requirió cierta consistencia. Esa fue la manera en la que inició mi trabajo en los medios de comunicación. Y también en la radio, paralelamente con Chucho Domínguez, en el programa Comentando el futbol». La crónica deportiva fue un paso natural, debido a su gusto por hablar sobre deportes. El proceso de conversión fue arduo, pero también se demostró su talento natural para la narración deportiva.

«Yo creo que cumplí un proceso, quizá personal y particular, pero creo que al mismo tiempo, algunos comentaristas, conductores, también se sentirán identificados; el estar al frente de una cámara, tener un micrófono, en mis inicios implicaba cierta presión por enfrentar algo desconocido, pero obviamente al estar en un terreno que se domina, que es el mundo de los deportes, poco a poco se va adquiriendo la soltura necesaria».

Hoy es un periodista deportivo con más de 25 años de carrera. Experimentado, curtido en todas las eventualidades de las transmisiones, es ampliamente reconocido por su labor, tanto en estaciones de radio como en televisión. En la narración de tenis, ha logrado transmitir los torneos más prestigiosos: la Copa Davis y los denominados 4 Grand Slam (Abierto de Australia, Wimbledon, Abierto de Estados Unidos y Roland Garros).

«Lo que más me gusta es narrar los grandes eventos, tener oportunidad de estar ahí, en las canchas, tener oportunidad de estar al borde del cuadrilátero y narrar las grandes hazañas de los deportistas mexicanos, eso es lo que más me divierte. No deja de ser entretenido, por supuesto, los programas de análisis, los programas donde se comunica lo que está sucediendo en otros lugares del mundo, pero particularmente la posibilidad de estar en el mismo escenario donde está gestándose la historia deportiva es lo que más me gusta».

Y así ha sido, a la fecha ha participado en la transmisión de los grandes eventos deportivos del mundo: Copas Mundiales, Juego Olímpicos, Campeonatos Mundiales de boxeo y otros tantos. Como todos, Vargas recuerda con especial cariño aquellas transmisiones que han marcado su carrera, aquellas experiencias que le han dejado una gran satisfacción: «Como eventos deportivos, desde luego, el reciente Campeonato Mundial de Rusia 2018, para mí fue algo que me dejó marcado, por lo que significó en mi desarrollo profesional, por la participación que tuve, por el conocimiento de una nación que para mí hasta ese momento era desconocida y de la cual en torno a ella había demasiados mitos que terminaron por revertirse y regresar con otra connotación muy positiva. »Los Juegos Olímpicos de Londres fue otra de las experiencias que también me fascinaron, el poder estar en un país, en una ciudad, donde se transpira deporte, donde la mayor parte de los deportes han sido reglamentados, la exactitud y la maestría con que fueron ejecutados esos Juegos Olímpicos. También con el grato sabor de que se obtuvieron medallas, como la medalla olímpica de oro en el futbol soccer. Esos dos eventos son los que recuerdo con más cariño. »Sin duda me parece que en términos de boxeo, cuando Juan Manuel Márquez por fin logra vencer a Manny Pacquiao, realmente exploté de alegría en plena transmisión, arrojé papeles, me emocioné de una manera quizá desmedida, pero creo que era el sentimiento que compartían millones de mexicanos y haberlo vivido en la arena, ahí al borde del ring, haber seguido esa trayectoria de desilusión que traíamos con Juan Manuel Márquez enfrentando a Manny Pacquiao, y que finalmente se hubiera revertido el momento con un triunfo glorioso, porque además fue un knockout que queda para la historia como uno de los más grandes. »También, si me remito a los inicios, cuando tenía oportunidad de narrar la serie Copa Davis, cuando México le gana a España una serie Copa Davis importantísima, todavía justamente en el grupo mundial y en donde Leonardo Lavalle y Jorge Lozano le ganan a Sergio Casal y Emilio Sánchez Vicario el dobles, en el Club Alemán; tuve la oportunidad de narrarlo y transmitirlo. O el triunfo de Rafael Nadal en sus dos Abiertos Mexicanos de Tenis, que también tuve ocasión de narrar, realmente fueron historias fantásticas».

En sus inicios en MVS radio trabajó en los noticiarios de Pedro Ferriz de Con y Carmen Aristegui. Luego tuvo la oportunidad de trabajar en Score Final, un programa con más de 25 años de transmisiones, conocido por mantener una amplia gama de coberturas, ofrecía diversidad de deportes. Posteriormente, gracias al buen entendimiento del aspecto económico detrás de las transmisiones de radio y televisión lo llevan a puestos directivos en MVS. Es en este medio que tiene la gran oportunidad de narrar, junto a su ídolo Raúl Ramírez, el Abierto Mexicano de Tenis Siendo un aficionado de los deportes, ciertos cronistas deportivos dejaron en él un recuerdo entrañable: «Jorge Sonny Alarcón y Ángel Fernández fueron mis referentes y los recuerdo con gran cariño. De Ángel Fernández, bueno, obviamente, en estos mismos estudios de radio (Radio Fórmula Polanco) nos encontramos, él trabajó durante muchísimo tiempo. No me tocó trabajar con él directamente, pero sin duda, siendo aficionado al futbol desde luego escuchar sus épicas narraciones, me motivaron a tratar de conocer este mundo. De Jorge Sonny Alarcón, también sus narraciones de boxeo, aunque él también era polifuncional. »Y en la actualidad, la verdad que estoy muy contento y orgulloso con lo que vivo día a día con mis compañeros en Televisión Azteca, porque me doy cuenta que aunque se ha convertido en una cotidianeidad para mí estar con ellos, pues son grandes referentes de la narración deportiva, son el ahora, el hoy. Nombres como Toño Rosique, como Christian Martinoli, como Luis García, como Julio César Chávez, como Eduardo Lamazón, comunicadores que realmente tienen una pegada fuertísima con el público. En el boxeo, qué te puedo decir, cada semana estoy con Julio César Chávez González, el más grande peleador mexicano de toda la historia, con mis compañeros, que hemos amalgamado un equipo que ha hecho historia en los últimos doce años transmitiendo ininterrumpidamente».

Rodolfo Vargas Espíndola se ha mostrado como un periodista deportivo proponedor, capaz de comprender las oportunidades dentro del mercado televisivo. En ese sentido tuvo el tino de unirse a un grupo de comentaristas que reavivaron las casi extintas funciones de boxeo en México. En un movimiento torpe, que inició en los noventas, los dirigentes del boxeo mundial y las televisoras decidieron hacer del boxeo un deporte transmitido mayoritariamente mediante Pay Per View (pago por evento), sin comprender que se trataba de un deporte popular y que, al hacerlo un deporte elitista, se estaba condenando al boxeo.

En 2006, cuando TV Azteca decidió relanzar las transmisiones de boxeo fue una verdadera apuesta, ya que se pensaba que el interés en dicho deporte se había perdido en el país. La conformación del equipo de transmisiones de Box Azteca, La Casa del Boxeo, fue clave para el éxito: Carlos Aguilar, Eduardo Lamazón, Julio César Chávez, Marco Antonio Barrera y Rodolfo Vargas Espíndola, quien ya contaba con experiencia en la narración de funciones de box. El equipo estaba conformado por ex-boxeadores mexicanos que conquistaron campeonatos mundiales, analistas reconocidos y excelentes cronistas.

Las transmisiones de box de TV Azteca han recalado en el gusto de la audiencia debido a la gran personalidad que han sabido imprimirles. Las frases, el modo de hablar de cada uno, han contribuido a crear algo memorable no solo para los fans del boxeo. “¡Se dobla, se dobla, pero no se rompe!”, apunta estridente el Jefe Vargas cuando un boxeador resiste apenas una andanada de golpes en el ring y luego pasa el micrófono al especialista: “¡Díganos la tarjeta don Lama, Lama, Lamita!”.

En TV Azteca ha colaborado en diversos programas además de las funciones de boxísticas, tales como Los Protagonistas, DeporTV, Deporte Caliente y otros, donde ha cubierto las noticias del mundo deportivo. Además ha complementado su trabajo en la televisión con columnas como Guantes, Sudor y Lágrimas, en El Heraldo de México, con cápsulas para medios digitales, y con Contraataque Deportivo, que se transmite en cadena nacional por Radio Fórmula en el 104.1 de F.M. Con esta experiencia, Rodolfo Vargas tiene claras las singularidades que exige la crónica deportiva para cada medio y encuentra en la radio un medio más flexible y con un toque especial.

«La radio termina por ser más descriptiva cuando estás hablando del evento, tienes que enaltecer algunos detalles que si estás en televisión la gente ya los está viendo, esa creo que es la parte fundamental. La radio también te permite, en lo que son programas hablados de análisis, poder extenderte, poder concluir tu idea; si tienes la necesidad de decir algo más lo puedes hacer. A veces los tiempos de televisión son muy cortos, muy específicos, muy cerrados y tienes que acotar. A través de la radio puedes transportar a la gente a algo que no está viendo y te da la opción de que en un momento algo que es muy bueno, lo hagas extraordinario, porque no lo están viendo. Es una ventaja que tiene la radio, el poder crear en la imaginación del oyente la posibilidad de estar en un escenario, en un estadio y viviendo emociones más allá de lo que son en la realidad».

Sobre su estilo y manera de comprender la narración de los deportes dice Rodolfo el Jefe Vargas: «La crónica deportiva es la capacidad de transmitir lo que está sucediendo en el terreno de juego, pero exaltando lo que conlleva la palabra deporte, que es pasión, entrega, y que, desde luego, provoca sentimientos muy particulares cuando se tienen deportistas mexicanos participando. En los tiempos actuales no solamente es relatar lo que está sucediendo, hay que hacerlo pero al mismo tiempo hay que tener la capacidad de transmitir esa emoción que es capaz de provocar un deporte, un triunfo, o también lo contrario, una derrota, una desilusión, que el público sienta, a través del medio, lo que uno de primera mano está viendo y está sintiendo. »Es tanta la oferta, afortunadamente, en estos tiempos que se puede seguir cualquier liga del mundo de futbol soccer, ver funciones de boxeo de cualquier parte del mundo o seguir toda la gira del tenis a nivel internacional, que creo que cuando también el evento de alguna manera no está respondiendo a las expectativas, hay que generar una conexión con el público buscando que la pase bien, porque a final de cuentas el deporte, para la gente que lo está siguiendo a través de los medios, es un divertimento».

“La crónica deportiva es la capacidad de transmitir lo que está sucediendo en el terreno de juego, pero exaltando lo que conlleva la palabra deporte, que es pasión, entrega, y que desde luego provoca sentimientos muy particulares cuando se tienen deportistas mexicanos participando.”